Esta hermosa oración está inspirada en el padecimiento de Nuestro Señor Jesucristo, para darnos fortaleza a la hora de nuestras flaquezas, para tener presente la Pasión y Muerte del buen Jesús. Necesitamos llegar a Cristo a través de limpiar completamente nuestras almas, que no queden vestigios de pecados, purificarnos sintiendo dolor por la agonía de Jesús, la cual soportó para salvarnos a todos los hombres con la Preciosísima Sangre derramada que brotó de la su cabeza y cuerpo.
Esta bellísima oración al rezarla nos da esperanzas de ir al paraíso celestial, este lugar está preparado, sólo esperando cuando vayamos al cielo para ocuparlo, por lo que debemos tener paciencia de esperar cuando nos llegue la hora.
Permítenos Señor, a comprender tus palabras y promesas de vida eterna. Ayúdanos a no tener temores e inquietudes, que sepamos que somos imperfectos con muchas limitaciones. Confiamos plenamente en Tí, mi Cristo Señor, como los niños que perciben la seguridad y protección de su madre, junto con su profundo amor. Queremos caminar junto a Tí, aunque no podamos vislumbrar el sendero, conociendo con certeza que estás conmigo, que nunca nos abandonas.
Cristo, óyenos, porque eres infinitamente piadoso y por tu amor incomparable al prójimo, perdona las ofensas recibidas, producto de nuestras miserias humanas. Sólo Tú eres Perfecto, sólo Tú eres Fuerte, sólo Tú eres compasivo.
Alma de Cristo
Alma de Cristo, santifícame.
Cuerpo de Cristo, sálvame.
Sangre de Cristo, embriágame.
Agua del costado de Cristo, lávame.
Pasión de Cristo, confórtame.
¡Oh, buen Jesús!, óyeme.
Dentro de tus llagas, escóndeme.
No permitas que me aparte de Ti.
Del maligno enemigo, defiéndeme.
En la hora de mi muerte, llámame.
Y mándame ir a Ti.
Para que con tus santos te alabe.
Por los siglos de los siglos. Amén.
Por medio de la oración le rogamos a Dios que nos escuche. Su llaga Preciosa de su Sagrado Costado sana a los enfermos y nos conduce al camino para estar cerca de Dios Todopoderoso para así disfrutar, si lo llegamos a merecer, de la eternidad por siempre.
No podemos alejarnos de Dios, pues existe la maldad que está acechando continuamente, buscando nuestras debilidades para que perdamos el buen camino.
Los demonios con su veneno, su engaño, quieren doblegarnos, por eso auxílianos Mi Señor, socórrenos Alma de Cristo. Nunca te olvides de mí, oye mis súplicas, cuando fallezca, Jesús mi Redentor, llámame y convócame a ir a Ti, que con alegría y plenitud acudiré!.
Con mucho amor y entrega, es aconsejable inclinar la cabeza mientras se reza esta oración, pues describe momentos angustiosos, con ella se logra obtener la reparación de todos los pecados cometidos contra Nuestro Señor Jesucristo. Se debe orar todos los días con inmensa Fe.
Oración a cristo para hablar con Dios hoy
Alabado sea el Alma de Cristo, Señor, Dios que todo lo puede, te suplico me veas y me muestres tu rostro para ser salvado. Comprendemos, Cristo Señor, que es engreído pedir verte cuando aún no tengo merecimiento, pues mi corazón sigue impuro. Dios Misericordioso, ten piedad.
Entre mis plegarias, te ruego me purifiques y que con ello, pueda volver a tener la seguridad de contemplar tu caridad infinita. Mi Cristo bendito, sé que eres bondadoso, líbrame de todo pecado y enséñame a hablar con Dios por medio de Ti, rescátame de las sendas equivocadas y dame serenidad y sabiduría para soportar el peso y las congojas que nos toca soportar.