No siempre estamos bien, a pesar de estar económicamente estables o en una relación duradera, hay que aceptar que algunas veces, nuestra vida no está como deseamos el 100%, no está mal admitirlo, no está mal aceptar que no estamos bien, que nos falta algo.
Hay momentos en los que pasamos por alguna pérdida o situación y nos dedicamos a blasfemar, a dudar del amor de Dios y de la virgencita, y ahí es cuando debemos asumir que sí, que aunque no estemos enfermos físicamente, tenemos que sanar nuestra alma, nuestro corazón y nuestra fe.
Apoyo incondicional
Es importante tener fuente de apoyo espiritual ante una adversidad como las enfermedades que nos mantienen en angustia, por no tener certeza completa de los que nos depara la vida.
El refugio para estos momentos sin duda es la oración, que nos permite abrir un canal de comunicación con Dios. Hablar con Dios, es orar y reconocer la presencia de nuestro Señor Jesucristo, ponte en sus manos, solo no podemos, siempre hay que buscar una palabra de aliento y esperanza, el hará el milagro y procederá a tu
Sanación, según tu fe y amor al prójimo, el sanará tus heridas, te reconfortará en tus sufrimientos, te cubre con un bálsamo de amor para eliminar tus quebrantos, si dejas entrar en tu corazón la caridad, humildad, obtendrás la gracia de amar a tu prójimo, con el solo hecho de comprenderlo, se cierran las heridas.
La siguiente oración te permite ese dialogo con El Señor, para que te alivie en tu sufrimiento o problema con otras personas, donde te indica que tipo de enfermedad y el nombre de la persona enferma, ora con devoción y fe.
Oración de sanación
Señor tu Palabra dice: “Ámense los unos a los otros como yo los he amado.” Reconozco de todo corazón, que en muchas ocasiones he desobedecido este mandamiento, consciente o inconscientemente. Pero además sé que por mi cuenta yo solo no puedo cumplir plenamente ese mandamiento porque mi capacidad de amar a mi prójimo es muy limitada. Es por eso que humilde y confiadamente recurro a ti y pido que me concedas la gracia de amar a toda persona.
Y por el amor que viene de ti , derrame tu Santo Espíritu sobre (nombre), quien hoy abre su mente, corazón y alma a ti, para que la sanes de sus heridas espirituales, sus enfermedades físicas, especialmente la sanes de (indicar la enfermedad).
Te pido, Jesús, que al apoyarme en el poder infinito de tu Preciosísima Sangre Redentora y en tus Santas Llagas, sanes toda herida que esta persona haya ocasionado a los demás, consciente o inconscientemente.
Oración de Sanación para un ser querido
Señor, confío en el poder infinito de tu Santa Cruz al pedirte que erradiques de su corazón todo rastro de rencor y odio, para permitir una conversión total de su corazón.
(La persona que ora le indica a la otra persona por quien se ora que repita las siguientes frases;)
Señor te doy permiso
de cambiar todo aspecto de mi alma
que no esté conforme a tu santa y perfecta Voluntad.
para que tu amor incondicional
fluya a través de mi al mundo entero.
sobre todo a aquellas personas
que más me han herido.
Señor: dame la gracia de ver la necesidad
que tiene mi alma
de reconciliarme con las personas
que más me cuesta perdonar.
Amen.
Sanar es un proceso de conversión, un completo acto de fe
Nuestros corazones serán bendecidos con la Luz del Espíritu Santo que nos llenara de fuerza y valor para soportar y salir victorioso por medio del gran poder de Dios. Hablar con Dios hoy es más fácil que nunca.

Otras oraciones de sanación
Nuestra Madre María, siempre nos cubre con su manto e intercede por nosotros, llevando a Jesús todas nuestras preocupaciones, aflicciones para que nos ayude con las tristezas, penas que estemos pasando.
Que siempre dialogue contigo Señor y en todo lugar, ayúdame a orar como mereces, en cualquier momento, porque contigo estoy seguro, lleno de tu paz que me abriga para salir adelante, que en mi oración haya confianza en tu amor, en tu amistad. Dios socórrenos en los momentos difíciles y santifícanos en el dolor, que todo pase, sanando las heridas, convirtiéndome y abriendo mi corazón cada vez más para Ti.
Ven apiádate de mí, te entrego todo mi ser, entra en mí, llena toda mi alma, se haga todo según tu santa voluntad.
Pide siempre al Señor
Señor dame sabiduría, tu sufriste injustamente, todos los sabemos, a través de ti dame las serenidad y fuerza que necesito para soportar mi enfermedad y padecimiento.
Te recomendamos leer:
Oración por los enfermos
Ha sido difícil, permíteme llegar me inclino delante de Tu presencia en el Santísimo Sacramento del Altar, para adorarte, solo Tu puedes transformar el dolor en gozo haces brotar manantiales de esperanza a pesar de los miedos humanos, dentro de mi ignorancia ábreme los caminos hacia tu redención, te imploro pongas en mi la renovación de mi fe, que acreciente día a día, te lo pido Señor en Tu Santo Nombre.

Vivamos en paz y con amor
No nos llenemos de odio, de rencor, son enfermedades del corazón y del alma; vivamos siempre en armonía, aprendamos a perdonar y a soltar todo aquello que hace daño a nuestra vida. Una vez que te alejes de esos feos sentimientos, tu vida tomará otro camino, uno de más colores, de más felicidad y plenitud y se notará por donde camines, con quien hables y a quienes adores.